Si alguien por la zona quiere emociones fuertes,no tiene mas que acercarse a Rio Grande en Brañaverniz.si lo coges desde abajo la cota de sufrimiento en la subida se dispara hasta límites irracionales.Unas rampas en asfalto bastante pronunciadas te acercan,un final en hormigón que te deja preparado y rematar con un buen trecho de trialera infame en subida.
Y si se pilla del otro lado en bajada hay que estar psicológicamente preparado para afrontarlo.
Es bueno de vez en cuando acercarse por aquí para quitarse las telarañas.
La ruta es bonita,merece la pena.
