Podría completarse la frase añadiendo sin dirección,pero no es el caso.Sin embargo ya hacía muchos años que no me planteaba una escapada alocada.Coger la bici con el firme propósito de hacer una ruta pero sin nada planteado.Para tardar o no estar siquiera seguro de eso.
Ir más allá o adornar mucho el recorrido.Bueno,así hice.Tiré por donde siempre al principio y sin nada establecido me fui buscando la vida.En un punto de la ruta ya empiezas a notar que no controlas como de costumbre,no estás orientado al 100%,una sensación de tener que gestionar aspectos de la ruta que en la normalidad ni abordas.
Soy un extraño en lugares por los que nunca había pasado.Nombres que apenas recuerdo o ni conozco,un laberinto de caminos,senderos y carreteras entrelazados que me llevan a no se donde.
Pero no hay angustia,era lo que buscaba,ese instinto primario que convierte lo desconocido en algo interesante y la firme seguridad de que esos caminos llevan a algún lado más conocido.
Es gozar de sentirse un poco indefenso.La bici y yo,mi único sustento del bidón de agua que ya puede comenzar a escasear,el bolsillo en el que llevo las herramientas,la cámara de repuesto.Puede ocurrir cualquier cosa y ahí tengo que ser autosuficiente.
Me ha gustado la experiencia,hacía tiempo ya.
Vuelta a casa.
